En las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias llamamos a votar críticamente por los partidos de izquierda

Elecciones primarias en Argentina 2023 – #PASO2023

Socialistas Sin Fronteras


El próximo domingo 13 de agosto, se llevarán a cabo elecciones primarias en Argentina, en las cuales se elegirán candidatos a presidente, vicepresidente, 43 representantes del Parlasur, 130 diputados y 24 senadores. Los candidatos que ganen las elecciones primarias contenderán en las elecciones generales del 22 de octubre, pero para poder contender en los comicios nacionales, los distintos frentes políticos, incluidos los de la izquierda, deben obtener por ley un mínimo de 1.5% de los votos válidos.

Las primarias abiertas son un mecanismo electoral instituido en el año 2009 fundamentalmente para facilitar la selección de candidatos de los distintos frentes emergentes de los grandes partidos burgueses y ordenar la fluidez del proceso electoral de la clase gobernante.

La izquierda obrera y socialista argentina se presenta dividida en estas elecciones. Nuestra organización, SOCIALISTAS SIN FRONTERAS, sostiene la posición de que la izquierda argentina no debería recurrir a las PASO para determinar sus candidatos a las elecciones generales, sino que deberían haber organizado previamente sus propias elecciones internas, incluyendo a todos los partidos de izquierda, con mecanismos democráticos y transparentes. Con este mecanismo la izquierda podría haberse presentado en todas las elecciones con un programa unitario que le daría mucho mayor autoridad política para presentar su programa frente a los candidatos de la burguesía.

Por esta razón es que llamamos a votar críticamente por la izquierda en general y no por ningún frente o partido en particular.

Estas elecciones se llevan a cabo en el marco de una crisis fundamental del capitalismo argentino y del agotamiento de las opciones mundiales de sustentabilidad capitalista social y ambientalmente.

El 2001, significó un hundimiento de la economía argentina a límites inimaginables en ese momento, en donde presenciamos el corralito, las fogatas y ollas populares en las esquinas de la ciudad de Buenos Aires, y los cascarones de las franjas industriales destruidas por la década neoliberal menemista anterior, entre otras cosas.

Después de las grandes movilizaciones del 2001 que llevaron a la caída de 7 presidentes en una semana, al establecimiento del kirchnerismo en el poder, la institucionalización de los piqueteros y planes sociales de subsistencia mínima para enormes masas pauperizadas, se daría un periodo de limitada estabilidad, que dentro de las fisuras profundas del capitalismo argentino, no haría sino entrar en un túnel sin futuro cierto.

Estas dos décadas de “estabilidad y recuperación”, se marcan por la enorme sobre-explotación del suelo con la producción de soja para la exportación, la destrucción de los glaciares y la venta del agua, y la extracción irresponsable de gas e hidrocarburos, así como la entrada de capital brasileño y ahora chino, para una producción imperialista y saqueadora.

En estas dos décadas de “estabilidad y recuperación”, vimos la ya deteriorada infraestructura del país, caer sin límites ante el abandono y la negligencia estatal, desde escuelas con techos caídos y sin calefacción o aire acondicionado para las temperaturas extremas del verano e invierno, hasta la total falta de insumos en las clínicas y hospitales de las grandes mayorías, los ferrocarriles sin mantenimiento y falta de recursos para las universidades, la biblioteca central y otras instituciones culturales de alto valor social, etc.

En estas dos décadas de “estabilidad y recuperación” no hubo más empleo ni más seguridad social. La precarización laboral continuó el camino trazado en la decada menemista, devaluando los salarios, poniendo en negro a mas trabajadores, reduciendo beneficios medicos y sociales, y estableciendo una pobreza permanente con planes irrisorios y la regularizacion del empleo doméstico entre otras cosas minimas. También claro se pintó de progre, con la adopción de medidas de avance social en relación al matrimonio igualitario, el reconocimiento de la diversidad de género y la adopción de medidas de inclusión meramente decorativas. Y claro esta, la legalizacion del aborto, forzada por la monumental lucha de las mujeres argentinas.

Y ahora nos encontramos al final del túnel. Al final de este ciclo de la economía capitalista, agotando todas las posibilidades de “estabilidad y recuperación”. Con un nivel de inflación infartante, por decir lo menos. Y una clase media enloquecida por la posibilidad de explosiones sociales, buscando en la mano dura, la represión, y los candidatos de extrema derecha, la solución a “sus” problemas.

Y al final de este túnel, se nos presentan cinco posibilidades en el recambio de mando, 1) continuar con los que nos llevado por este camino de “estabilidad y recuperación”, pírrico y sin salida, el kirchnerismo, 2) irnos con los sostenedores de los privilegios de la burguesía agrícola “sojera” que recientemente gobernara con Macri y el PRO, 3) hundirnos en la espiral sin fondo de la histeria pequeñoburguesa anti-planes sociales, anti-villeros, anti-inmigrantes, anti-inseguridad, mano dura e hiper reaccionaria, liderada por el demagogo libertario Milei, 4) opciones socialistas, anticapitalistas, de trabajadores, en estos momentos divididas, en dos principales posibilidades, la liderada por el PO-MST, y la otra por el PTS-IS, y 5) la abstención y el voto nulo propuesto por algunos grupos de izquierda, con el Nuevo PST, y OIR.

Son las elecciones el medio definitorio para la resolución de los problemas de los argentinos, o de los trabajadores en cualquier otro lugar del mundo? Absolutamente NO. La resolución a los problemas de fondo y de superficie de todos los trabajadores se encuentra en su organización y movilización revolucionaria contra los causantes de estos problemas, la burguesía y el imperialismo. La resolución se encuentra en la decisión de los trabajadores de tomar el poder y las riendas de su destinos y acabar de una vez con nuestros explotadores, para poder construir una sociedad igualitaria y justa que pueda proveer a todos de lo necesario para una vida digna, y pueda enfrentar los estragos de una crisis ambiental en marcha.

Sin embargo, las elecciones, si… burguesas, son un hecho de la realidad. Un frente más para la lucha. Y los trabajadores debemos tomar cualquier frente de lucha en el que podamos no solo arrancar soluciones para problemas inmediatos, sino en donde podamos amplificar nuestra voz y dar la disputa ideológica y política con los distintos sectores de la burguesía. Utilizarlas para llamar a los trabajadores a organizarse, a romper con las opciones políticas de la burguesía, a apoyar opciones que se reclaman de los trabajadores, o a construir sus propias opciones.

En estas elecciones, muchos trabajadores se verán encantados, chantajeados o forzados para votar por una de las tres opciones burguesas, una mala, otra peor y otra super peor, en la desesperación de salir de este túnel sin salida que llevará irremediablemente al advenimiento de una nueva crisis económica y social de enormes magnitudes, aún peor a la vista en el 2001.

Nuestra organización, SOCIALISTAS SIN FRONTERAS, considera que la abstención y el voto nulo no ayudan en la lucha por las conciencias de los trabajadores en búsqueda de una solución obrera socialista e internacionalista. Nosotros llamamos a las dos principales organizaciones contrincantes de la izquierda, PO-MST y PTS-IS a declinar en favor de la otra, el PO-MST a favor del PTS-IS, o el PTS-IS a favor del PO-MST, y así no presentar una alternativa socialista dividida en estas elecciones. Sabemos lo difícil que sería para cualquiera de las dos organizaciones aceptar esto. Pero si realmente creemos que los intereses de los trabajadores, y los desposeídos a lo largo del país, deben anteponerse ante cualquier diferencia política, esta propuesta debería ser considerada antes de las PASO.

Mientras tanto, llamamos en estas elecciones, a votar críticamente por uno de los partidos de izquierda que se han presentado a la contienda. Y llamamos a todas las organizaciones socialistas y revolucionarias, así como a los trabajadores, a los desposeídos y a todos los grupos marginados, a seguir trabajando en las opciones de lucha necesarias para terminar con la explotación capitalista y construir una sociedad igualitaria y justa en solidaridad con los trabajadores del mundo y en defensa del planeta.

SOCIALISTAS SIN FRONTERAS